Enemigos del metabolismo

Se mencionarán algunos enemigos, para entender, cómo restaurar el metabolismo evitando los mismos. El exceso de azúcares y carbohidratos refinados . Los carbohidratos se dividen en: refinados y, naturales dulces y no dulces. Se describirán a continuación.

Carbohidratos refinados

Son los que de alguna manera están procesados, cocinados, molidos, pulidos o refinados, haciendo que sean absorbidos con más facilidad, elevando así los niveles de glucosa en el cuerpo; por consiguiente, se creará grasa corporal. El cuerpo responde al exceso de azúcar, por consumir muchos carbohidratos refinados, por lo que segrega la hormona de la insulina, esta convierte el exceso de glucosa en grasa. El exceso de insulina interfiere con las hormonas de la glándula tiroides, esta misma controla el metabolismo y la temperatura del cuerpo.

Los carbohidratos refinados son adictivos, por lo mismo, las personas no se pueden controlar y comen demasiado; además, causa un estado de acidez en el cuerpo que baja el metabolismo y reduce el oxígeno.

¿Qué es el estado de acidez?

Primero se explicará, qué es el ácido láctico, se produce con parte de la glucosa que se genera al consumir carbohidratos refinados, esta se fermenta en el cuerpo y así se crea el estado de acidez.

Ejemplos: harina de trigo, harina de maíz, endulzantes de maíz, papa deshidratada, harina de soja (soya), hamburguesas, pizza, pan, pastas, refrescos azucarados, etcétera.

Efectos de consumir carbohidratos refinados: cansancio, sueño, poca energía y desbalances hormonales.

Carbohidratos naturales dulces y no dulces

Son considerados la mayoría de los vegetales y las ensaladas. Tienen contenido alto de fibra, lo cual no es perjudicial. Las fresas y manzanas se clasifican como carbohidratos naturales, porque son frutas que no son muy dulces.

En cuanto a los dulces, también provienen de la naturaleza, pero tienen altos niveles de azucares que se pueden transformar en grasa con facilidad, por lo tanto, se deben consumir con moderación.

Frutas dulces: banano, mango, piña y pasas. Vegetales dulces: maíz, remolacha, zanahoria y tomate.

El estrés y sus efectos

El estrés es una reacción de nuestro cuerpo, ante amenazas ya sea reales, imaginarias, internas o externas. Las amenazas externas pueden ser: un accidente, un movimiento inesperado, preocupación por el presente o futuro y pérdida de un ser querido; como consecuencia del estrés, las personas pueden sufrir ataques al corazón, por lo regular, no llega a este punto, pero si expone al cuerpo a una alarma general, que afecta al sistema hormonal y nervioso.

El ritmo de vida de algunas personas evita que sean conscientes que están en un estado de estrés continuo y se acostumbran a vivir así. Algunas amenazas internas son: infecciones, enfermedades y consumir alimentos agresores al cuerpo y estos producen la hormona de cortisol.

Un daño visible del estrés es: cuando una persona pierde un ser querido, se le ve envejecida y deteriorada. Existe un factor medible y es el hormonal. Cuando hay estrés en exceso, el cuerpo produce la hormona de cortisol, es la hormona del estrés porque se produce cada vez que se experimenta una situación estresante.

¿Dónde se produce la hormona de cortisol?

En las glándulas adrenales y están localizadas arriba de los riñones. Está hormona es vital para el funcionamiento de nuestro cuerpo, debido a que cuando estamos en una situación de peligro, le ordena al hígado que expulse la glucosa que tenía almacenada, dado que la glucosa da la energía para correr o pelear y sobrevivir ante las amenazas.

El problema se da, cuando la amenaza es de corta duración, por ejemplo, cometer un error en el trabajo, los niveles de glucosa aumentan debido al cortisol, como la amenaza que generó estrés no implica acción, la glucosa no es consumida por las células y queda excedente, el cuerpo la transforma en grasa que queda almacena para futuras ocasiones. Es así, como el estrés genera exceso de glucosa en la sangre y queda depositada como grasa en las caderas, cintura y abdomen.

Sustancias enemigas al metabolismo

Como hemos aprendido hasta ahora, lo que consumimos tiene efectos en nuestro cuerpo. Los alimentos procesados tienen colorantes, preservantes e ingredientes que pueden provocar desbalances hormonales y afectar nuestra la salud. A continuación, se mencionan algunos.

Los aceites poliinsaturados

El problema al usar este tipo de aceites es que, por su composición molecular, se oxidan, es decir, se pudren y afectan el funcionamiento de la glándula tiroides. Estos aceites se conocen como vegetales, entre ellos están: de maíz, de soya, de canola y de girasol.

Para preparar ensaladas se recomienda usar aceite de oliva o para saltear alimentos. Este aceite no soporta altas temperaturas por lo cual no se debe utilizar para freír alimentos. Para freír alimentos se puede usar el aceite de coco o de aguacate.

El aceite de aguacate que se debe usar es el que se extrae en frío, dado que con esta técnica se obtienen los nutrientes que contiene el aguacate como son sus antioxidantes y la vitamina E. Este aceite es beneficioso, debido a que ayuda a reducir la grasa abdominal, tiene la capacidad de penetrar hasta el interior de las células y ayuda a reconstruirlas.

La margarina

La margarina tiene un alto contenido de ácidos transgrasos, por lo que no es una opción saludable.

¿Qué son los ácidos transgrasos?

“Son moléculas de grasa que han sido dañadas y deformadas por el proceso de cambiar los aceites poliinsaturados, de su estado liquido a un estado sólido y hacer la margarina”. Este proceso se llama hidrogenación, se realiza calentando el aceite a altas temperaturas mientras se le aplica corriente eléctrica y se le bombea gas hidrógeno. Así obtienen la margarina, el color que tiene es blanco, color que no se antoja, por lo cual los productores le agregan colorante amarillo.

¿Por qué no es una opción saludable?

Porque las moléculas de los ácidos transgrasos, han perdido su forma molecular normal, entonces el cuerpo reacciona como que fueran tóxicos dado que no lo reconoce como comestibles y no las puede usar como sustento.

Si su propósito es adelgazar y subir su metabolismo, no debe consumir margarina.

El jarabe de maíz de alta fructuosa

¿Qué es el jarabe de maíz de alta fructuosa?

Es un endulcorante creado a partir del almidón del maíz. Tiene un alto contenido de fructuosa, además la mayoría del maíz del que se extrae ha sido genéticamente modificado, por esto es más dañino.

El único órgano que puede usar la fructuosa es el hígado, convierte a la fructuosa en ácido úrico, siendo este la causa de algunas enfermedades: artritis, gota, triglicéridos altos y una serie de otras sustancias inflamatorias que inician a dañar las paredes de las arterías y los riñones.

Existen estudios clínicos que demuestran el daño que ocasiona el jarabe de maíz de alta fructuosa, a nuestro cuerpo y metabolismo, lamentablemente se le sigue recomendando a las personas diabéticas y a los consumidores en general.

Se mencionan algunos productos que contienen jarabe de maíz de alta fructuosa: jugos de fruta, galletas, el yogurt, las jaleas, los panes, las barras de cereales, las pastas y los vegetales enlatados, los aderezos para las ensaladas, entre otros. En las etiquetas aparece en inglés como High Fructose Corn Syrup.

Los vegetales y frutas tienen fructuosa. Los vegetales tienen poca fructuosa, las frutas tienen más cantidad; consumir la fructuosa de los vegetales no es dañino, en cuanto a las frutas, se debe comer con moderación las más dulces. Recordemos, que los excesos hacen daño y debemos evitarlos.

El edulcorante artificial aspartame

Este edulcorante es sustituto de la azúcar, se venden como edulcorante casero y para restaurantes. La mayoría de los refrescos carbonatados de dietas se endulzan con aspartame. Se mencionan algunas reacciones: dolor de cabeza, mareos, migrañas, aumento de peso, depresión, fatiga, insomnio, problemas con la visión, entre otros.

Se realizó un estudio, en el cual, participó la doctora Helen Hazuda de la universidad de Texas, en dicho estudio se observó que los refrescos de dieta engordan. Los investigadores, llevaron las medidas de 474 personas y le dieron seguimiento por nueve años y medio. Las personas que tomaban refrescos de dieta aumentaron de cintura en un 70% en esos años, esto se da, no solo porque están endulzados con aspartame, dado que también contienen ácido fosfórico, este elimina el oxígeno del cuerpo y reduce el metabolismo.

La soya

La soya tiene un alto contenido de ácido fítico, es una sustancia que bloquea la absorción de minerales esenciales, como: el calcio, el magnesio, el cobre, el hierro y el zinc, siendo este último importante para proteger el sistema inmune, mejora la función sexual en los hombres y evitar el cáncer de próstata; además, contiene goitrógenos, son sustancias que bloquea la función de la glándula tiroides. Al afectar esta glándula, produce: depresión, fatiga, obesidad, caída de cabello, insomnio, frío en las extremidades y descontrol en la diabetes.

Además de lo antes mencionado, la soya no se puede consumir debido a que tiene su propia enzima natural que la hace difícil de digerir. Se empezó a consumir cuando China descubrió que se podía fermentar para consumirla, pero esto no significa que sea beneficiosa para nuestro cuerpo.

Otras sustancias enemigas

Se mencionan, otras sustancias que afectan al metabolismo:

El fluoruro: se usó para tratar a las personas con hipertiroidismo, para hacer lento el funcionamiento de la glándula tiroides.

Los medicamentos antidepresivos: estos aumentan la probabilidad de padecer el síndrome metabólico, engordan y que, tristemente causan depresión, porque afecta directamente a la tiroides.

El medicamente acetaminofén o paracetamol: afecta directamente al hígado y aumenta el riesgo de tener cáncer de seno.

Consejos para mejorar tu agitado día